martes, 30 de septiembre de 2008

Mendoza ``NO ESTÁ PREPARADA´´...


A partir de un intenso trabajo de investigación y de ya conocer la situación en nuestra provincia, podemos decir que ésta no se encuentra del todo preparada para responder ante cualquier erupción que pueda ocurrir tanto en Mendoza como en Chile, ya que bien sabemos que si erupciona un volcán del otro lado de nuestra frontera también afecta a nuestra población.


Creemos que la población mendocina no se encuentra informada acerca de los peligros que trae la explosión de un volcán, teniendo en cuenta que Mendoza cuenta con varios de ellos y muchas personas no saben de su existencia.


Según lo investigado, nos pareció importante destacar que el trabajo realizado por Defensa Civil, son tareas para atender las emergencias, pero no para prevenir, lo cual nos indica una vez más que lo que nos falta es prevención.


Se puede decir que nuestras condiciones para generar situaciones de seguridad frente a las diferentes amenazas que hay en la provincia, son realmente poco alentadoras.


A nivel provincial no existe un plan de gestión de riesgos y ni siquiera se cuenta con la información necesaria para producirlo. Esto no quiere decir que no exista información, por el contrario desde diferentes sectores de la ciencia local se hacen importantes aportes sectoriales al problema del riesgo, incluso para algunos casos puntuales (Luján de Cuyo) se han construido mapas de peligros múltiples o de riesgo. Pero esa información no está sistematizada ni unificada a nivel de la provincia.


Pensamos que prever la posibilidad de la erupción de un volcán implica tener en cuenta qué pasaría si por la erupción se derriten glaciares vinculados a nacientes de ríos que más abajo son utilizados para el uso humano, o tener un estudio pormenorizado de hacia dónde hay que evacuar la población, de qué manera, si se cuenta con los elementos necesarios para hacerlo y quienes serán los responsables de esa tarea. Implica también tener estudiada la capacidad sanitaria para atender intoxicaciones por inhalación de humo o quemados, saber si se cuenta con espacio en las escuelas para alojar damnificados en medio de la urgencia y muchos otros puntos.


Bien sabemos que las erupciones volcánicas pueden causar grandes pérdidas de vidas humanas y de propiedades en las cercanías a los mismos. Nosotros tenemos en nuestra provincia una extensa línea de volcanes activos desde el Tupungato y el Tupungatito hasta el sur de la provincia al que se suman los efectos que podríamos esperar de volcanes que en territorio chileno están próximos a la frontera. La mayor parte de ellos está dentro de los que se consideran de peligro a corto plazo, y el peligro a corto plazo se define como un volcán que erupciona más de una vez cada siglo y ha tenido manifestaciones después del año 1800; es decir, que una persona puede esperar tener la experiencia de asistir y/o ser víctima de al menos una erupción a lo largo de su vida.


Para prevenir y gestionar este riesgo, es necesario trabajar con evaluaciones de peligros, cuya forma de desarrollarlas están perfectamente pautadas desde organismos internacionales, y sobre todo con planificación restrictiva sobre el uso de las tierras, previendo a partir de modelos de simulación cuáles son las áreas potenciales de afectación, datos que deben ser volcados en mapas de zonificación de riesgo volcánico.


Esperamos que esta breve percepción y transmisión sea de interés y de posible concientización sobre la situación en la que nos encontramos.